La audición es un sentido esencial que nos permite comunicarnos, disfrutar de la música, alertarnos de peligros y conectarnos con el mundo que nos rodea. Sin embargo, a menudo no prestamos suficiente atención a su cuidado. La exposición a ruidos fuertes, la falta de conciencia sobre prácticas auditivas saludables y el envejecimiento natural del sistema auditivo son algunos de los factores que pueden afectar la salud auditiva. En este artículo, mencionaremos algunos consejos clave respaldados por la investigación científica para mantener una buena salud auditiva y prevenir problemas auditivos.
Consejo 1: Protege tus oídos del ruido excesivo
La exposición continua a ruidos fuertes puede causar daño a los oídos y provocar una pérdida auditiva permanente. Por lo tanto, es importante proteger nuestros oídos del ruido excesivo. Algunas medidas que se pueden tomar incluyen:
- Evitar la exposición a ruidos fuertes durante períodos prolongados, como la música alta con auriculares, conciertos, eventos deportivos ruidosos o maquinaria ruidosa en el trabajo.
- Usar protectores auditivos, como tapones para los oídos o protectores auditivos tipo orejeras, cuando se está expuesto a ruido excesivo.
- Mantener un volumen moderado en los dispositivos de audio personales, como reproductores de música o televisores.
Consejo 2: Mantén una buena higiene auditiva
El cuidado adecuado de la higiene auditiva también es importante para mantener una buena salud auditiva. Aquí hay algunas prácticas recomendadas:
Evitar la introducción de objetos extraños en los oídos, como hisopos de algodón, ya que pueden dañar el conducto auditivo y empujar la cera más profundamente, lo que puede provocar obstrucciones o infecciones.
Limpiar suavemente la parte externa de los oídos con un paño húmedo o toallitas especiales para los oídos.
No utilizar agua ni productos químicos para limpiar los oídos, ya que pueden irritar la piel sensible del conducto auditivo.
Consejo 3: Mantén una buena salud general
La salud general del cuerpo también puede tener un impacto en la audición. Algunas medidas para mantener una buena salud general que puede contribuir a una buena salud auditiva incluyen:
Mantener una alimentación equilibrada y saludable, rica en nutrientes esenciales como vitaminas y minerales, que contribuyen a la salud de los oídos y del sistema auditivo en general.
Mantener un estilo de vida activo y realizar ejercicio regularmente, lo cual mejora la circulación sanguínea y la salud cardiovascular, lo cual puede tener un impacto positivo en la salud auditiva.
Controlar enfermedades crónicas como la diabetes, ya que la diabetes mal controlada puede estar relacionada con un mayor riesgo de problemas auditivos.
Consejo 4: Programa revisiones auditivas regulares
Realizar revisiones auditivas regulares con un profesional de la salud auditiva, como un audioprotesista o un otorrinolaringólogo, puede ayudar a detectar problemas auditivos en etapas tempranas y abordarlos de manera adecuada. Se recomienda que las personas se sometan a revisiones auditivas al menos una vez al año, especialmente si tienen factores de riesgo como exposición a ruido excesivo, antecedentes familiares de problemas auditivos, o si experimentan síntomas de pérdida auditiva como dificultades para escuchar o zumbidos en los oídos.
Consejo 5: Mantén una buena conciencia sobre la salud auditiva en entornos laborales
Algunas ocupaciones pueden estar asociadas con una exposición prolongada a ruido excesivo en el lugar de trabajo, lo que puede aumentar el riesgo de pérdida auditiva ocupacional. Es importante mantener una buena conciencia sobre la salud auditiva en el entorno laboral y seguir las normas de seguridad auditiva, incluyendo el uso de protectores auditivos apropiados y tomar descansos regulares para proteger los oídos del ruido excesivo.